La energía nuclear es aquella que se obtiene al aprovechar las reacciones nucleares. Estas se dan en isótopos de ciertos elementos químicos, siendo la más conocida la fisión del uranio-235.
Los dos sistemas con los que puede obtenerse energía nuclear de forma masiva son la fisión nuclear y la fusión nuclear.
La energía desprendida en esos procesos nucleares suele aparecer en forma de partículas subatómicas en movimiento, éstas producen energía térmica al frenarse con la materia que las rodea, que a su vez se transforma en energía mecánica utilizando turbinas de vapor, que puede ser empleada en el transporte o para la generación de energía eléctrica.
La principal característica de este tipo de energía es la alta cantidad de energía que puede producirse por unidad de masa de material utilizado en comparación con cualquier otro tipo de energía conocida por el ser humano.
En general, cualquier aplicación industrial genera residuos. Pero el tratamiento que se emplea en los residuos radiactivos es crítico ya que tienen una gran inestabilidad y una amplia longevidad. Una de las técnicas más utilizadas es el prensado y secado para reducir su volumen, luego se hormigonan y se embidonan para ser almacenados durante un periodo de 300 o de 500 años.